Tres mujeres para la historia
En un espacio, hasta ahora dominado por hombres, tres mujeres puertorriqueñas se abren paso en el Comité Ejecutivo federativo. Aunque se desenvuelven en diferentes ámbitos profesionales, su pasión y sus corazones palpitan al unísono por el deporte rey en la Isla. Sus encomiendas son intensas, profundas y, más aún, transcendentales para el siguiente paso de nuestro deporte Puerto Rico.
Las tres han aceptado el reto desde hace mucho, trabajando desde la base del fútbol. En efecto, sus hojas de servicio al deporte puertorriqueño son extensas.
Zaira Aponte, encargada de presidir las Comisiones de Responsabilidad Social y de Mercadeo y Medios Informativos, se involucró en el ambiente futbolístico hace ocho años, gracias a sus hijos que a muy temprana edad, comenzaron a practicar el deporte. Desde las gradas, observó cómo el fútbol aportaba al aspecto social y emocional de los niños. Por lo que como profesora, decidió colaborar voluntariamente en la directiva de un club hasta llegar a presidirlo.
Para Aponte, lo más complicado dentro del mundo del fútbol es la educación. En su opinión, existe un concepto erróneo de que para ser exitoso, lo único que se necesita es saber jugar.
“De mi parte, pueden esperar disposición y compromiso en todo lo que concierne a las comisiones que presido. Solo han pasado tres meses desde que comenzamos y hay mucho trabajo y proyectos que realizar”, expuso.
Anita Rabell, presidenta de la Comisión de Fútbol Femenino cuenta con una historia muy vasta en el deporte, involucrada en el fútbol puertorriqueño por más de 20 años. Como jugadora, fue reconocida como la Portera Más Valiosa en una ocasión y tuvo el privilegio de representar a Puerto Rico. Luego como entrenadora, dirigió las categorías U5, hasta la Superior. Este mérito que le hizo ganarse un lugar como asistente en la Selección Mayor, Olímpica y U17.
Como administradora y gestora, Rabell organizó el Club Deportivo de Guaynabo, Las Conquistadoras y la Liga Superior Femenina de Fútbol Nacional de Puerto Rico.
“Las mujeres somos metódicas, luchadoras y persistentes. Traemos una perspectiva distinta de las cosas, otros puntos de vistas a ser considerados, que nutren, complementan y enriquecen los procesos y la toma de decisiones”, mencionó.
Entretanto, María Larracuente, presidenta de la Comisión de Finanzas y Administración, puede describirse en tres palabras: decidida, dedicada y disciplinada.
Entró al mundo del fútbol debido a la pasión por el deporte que sus hijos adquirieron después de la Copa del Mundo de 1998.
Tiene en su currículo el haber trabajado con todas las categorías masculinas y femeninas a nivel nacional e internacional por Puerto Rico. Para Larracuente, todas las mujeres dentro de las federaciones deportivas son un ejemplo de superación.
“Somos mujeres profesionales que deseamos servir a nuestro país. Vamos a dar lo mejor de nosotras, aportando conocimientos, experiencias y compromiso para contribuir al progreso del fútbol en nuestra isla”, terminó diciendo.
Estas mujeres son sinónimo de dedicación y entrega. A ustedes, que desde la administración de nuestra Federación ponen toda la pasión por los más fundamentales principios, le damos un merecido aplauso y toda nuestra confianza.