40 años de la visita del Cosmos al Loubriel

Hace casi cuarenta años, dieciocho puertorriqueños se dieron cita con la historia. A éstos se les unió un boricua por sentimiento. El escenario lo fue el estadio Juan Ramón Loubriel de Bayamón, el cual en aquel entonces albergaba la casa de los Vaqueros en el beisbol profesional de la Isla y donde seis mil fanáticos pasaron por los tornos en apoyo a los defensores de la monoestrellada.

Más aún, nadie en aquellos tiempos pensó que aquel estadio hoy reuniría a la grey más efervescente del deporte que arranca las más energizantes pasiones en el globo terráqueo.

En aquella época, en el 1975, en que pasó la tormenta Eloísa fuertemente por Utuado. En el norte de Ponce se presentaban las ruinas Igneris y pre Taínas. Y como fuera poco en la Isla se celebraba la coronación de la cagueña Wilnelia Merced Cruz en Miss Mundo mientras que la Federación Puertorriqueña de Fútbol organizó una serie de partidos amistosos entre la selección nacional y varios clubes de renombre internacional.

Entre los visitantes se encontraron el New York Cosmos que se enfrentó a aquella selección que se compuso de los celadores de los tres palos, el legendario Lito Gotay, Oscar Rosa y Reinero Ayala. Los defensas, Mariano Alméstica, Enrique Soriano, Tony García y Juan García. Los mediocampistas, Luis Villegas, Raúl Cotto, Wilfredo Rivera, Juan Bolin Sánchez y Jorge Palacios. Los delanteros, Pedro de Jesús, Felipe León, Arturo Vega, Orlando Winter, Bula Billot y Roberto Edward. El director técnico lo fue Luis Villarejo.

A pesar que en aquel entonces Pelé que militaba con el Cosmos llegó a la Isla lesionado durante un partido previo en Haití, éste jugó en el encuentro anotando un gol. Aunque el conjunto visitante fue superior a nuestra escuadra por 12 a 1, donde los nuestros jugaron con orgullo a flor de piel, el mediocampista Jorge Palacios anotó el del orgullo.

Aquella noche como otras subsiguientes el césped del Loubriel fue participe de la historia del fútbol puertorriqueño y cómplice de muchas históricas victorias. Nuestros jugadores escribieron sus nombres en nuestra historia deportiva y Luis Villarejo que en aquel entonces tomo la responsabilidad de la dirección, dio ejemplo de los que es la misión y la responsabilidad deportiva.

Con esta historia como otras queda demostrado que el fútbol puertorriqueño tiene mucha gloria e historia.